En una tranquila zona residencial de Sasebo se encuentra Shokudoen, un restaurante de barbacoa local muy apreciado. A pesar de su aspecto antiguo, su interior emana un irresistible aroma dulce y picante.
Los platos estrella de Shokudoen son los tradicionales intestinos y costillas a la parrilla. La carne marinada en una salsa a base de miso se cocina en una sartén de Genghis Khan y se sirve tradicionalmente con cebolla y cebolleta. El sabor de la salsa es verdaderamente tradicional, como en los viejos tiempos.
En el pequeño local se puede sentir la atmósfera de un restaurante de renombre que ha sido amado durante muchos años. El amigable dueño siempre está dispuesto a entablar una conversación. Aunque el pedido es sencillo y los platos varían, quizás esa sea parte del encanto de Shokudoen.
La única desventaja es la falta de estacionamiento. Sería prudente utilizar el estacionamiento de la calle comercial cercana o llegar en taxi. Sin embargo, es posible que desee evitar regresar con el olor de intestino a la parrilla.
Cuando visite Sasebo, asegúrese de hacer una parada en Shokudoen, un restaurante oculto que seguramente le ofrecerá un sabor ligeramente retro y nostálgico.
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