lugar de culto • 24 Sagakitaborichō, Ukyo Ward, Kyoto, 616-8367, Japón
Aunque Kioto es conocida por su gran cantidad de lugares históricos, el santuario Rokusen, escondido cerca de Arashiyama, es verdaderamente un tesoro oculto. Al caminar por el camino de entrada, uno se encuentra con un entorno tranquilo y sereno. Los edificios históricos y el jardín bien cuidado crean una atmósfera pacífica.
El santuario Rokusen es la pagoda fundadora del templo Boudo, construido por el shogun Ashikaga Yoshimitsu en 1380. Aunque el templo Boudo fue incendiado durante la Guerra de Ōnin, fue reconstruido durante la era Edo y se convirtió en el santuario Rokusen que conocemos hoy. Se dice que las palabras "Santuario Rokusen" fueron escritas personalmente por Yoshimitsu.
Al caminar por el camino de entrada, se encuentra un espacio amplio. Desde el salón principal hasta el salón para huéspedes, el jardín, la torre reliquia, hay muchas atracciones. Especialmente, el jardín elegante bajo el pabellón es impresionante. La temporada de hojas rojas en particular tiene un encanto especial.
Como hay pocas personas en el lugar, puede disfrutar de un paseo tranquilo y apreciar los paisajes de las cuatro estaciones. A veces, también se encontrará con un toque de humor que le arrancará una sonrisa.
Arashiyama es un destino turístico popular, pero el santuario Rokusen es un lugar secreto a pesar de estar a poca distancia a pie. Cuando lo visite, experimentará la paz y tranquilidad lejos del bullicio de Kioto.
Durante la visita especial, podrá experimentar espacios que normalmente no están abiertos al público. También hay visitas nocturnas en las que podrá disfrutar de vistas fantásticas iluminadas.
Cuando visite Kioto, asegúrese de pasar por el santuario Rokusen para experimentar el tiempo tranquilo y descubrir este tesoro oculto.
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