Restaurante japonés • 222-4 Chihara, Sakurai, Nara 633-0073, Japón
A unos 10 minutos caminando hacia el norte desde el Santuario Ōmiwa por el Camino de Yamanobe. Caminando por un tranquilo camino rural, aparece de repente el café escondido 'Hanamori'. Una construcción de estilo japonés que se integra perfectamente en el entorno natural.
Dentro hay un mostrador con alrededor de 6 asientos, pero el encanto de Hanamori reside sobre todo en su terraza-jardín. Tres mesas redondas rodeadas de grandes árboles donde se puede disfrutar de una comida en medio de la naturaleza. Insectos y frutos secos pueden caer del cielo, pero esto también es parte del encanto de esta experiencia especial que te permite sentir la temporada con todos los sentidos.
El plato destacado de Hanamori es el 'Hanamori Yasai Zen con somen de Miwa'. Incluye un surtido de verduras frescas locales cocinadas a fuego lento y tempura recién frita. El somen de Miwa, ofrecido como los platos sagrados del Santuario Ōmiwa, se sirve con 7 condimentos y otros ingredientes. Los fideos delgados y firmes crean una combinación perfecta con los demás ingredientes, ofreciendo un sabor digno de elogio.
Durante la temporada calurosa, se recomienda el kakigori especial de Hanamori. Puedes disfrutar de sabores únicos como el jarabe de azúcar negra con kinako, higos asados, y Earl Grey. La actuación de espolvorear kinako justo delante de ti añade un valor extra a tu experiencia culinaria.
Se recomienda utilizar el aparcamiento del Santuario Ōmiwa y llegar caminando. Al caminar por el Camino de Yamanobe, puedes disfrutar de un paseo sintiendo la historia de Nara y su naturaleza. Sin embargo, en verano puede hacer un poco de calor, por lo que es mejor visitar con ropa cómoda.
Hanamori es un lugar especial que condensa los encantos de la naturaleza, cultura y gastronomía de Nara. Disfrutando de comidas cuidadosamente preparadas en un entorno tranquilo, podrás tener una experiencia maravillosa que revitalizará tanto tu cuerpo como tu mente. Es un destino ideal no solo para parejas de mujeres o familias, sino también como una joya oculta de Nara que te recomendamos visitar al menos una vez.