Oshima, una pequeña isla en el Océano Pacífico. En su tranquilo y apartado paisaje, se conserva vívidamente el paisaje original de Japón. El minshuku "Kimoto" es una histórica y antigua casa de huéspedes que se encuentra en la entrada de la isla. Su antiguo encanto sigue siendo palpable, reflejando la naturaleza de la isla.
Desde la acogedora posada con el agradable sonido de las olas del puerto pesquero, se puede sentir la vitalidad de los pescadores. Por la mañana, la animada actividad de los pescadores que salen a pescar, y por la tarde, la charla de los pescadores que desembarcan en la playa con sus capturas. Es una escena fascinante que hace que parezca que el tiempo se detiene en la isla.
El verdadero placer de viajar radica en los sabores locales. Los platos servidos en esta posada son el supremo manjar que permite saborear plenamente los dones de la isla. Con guisos de pescado fresco y sabrosos platos con verduras de montaña, es fácil quedarse embriagado con los sabores.
La austera presencia de la posada conserva vívidamente el paisaje original de Japón. En cada diseño de habitación, mobiliario y detalles, flota un ambiente que trasciende el tiempo. Seguramente te podrás rendir al relajado tiempo isleño en este apacible espacio.
Si deseas disfrutar de este tiempo fuera de lo común, puedes hacer tu reserva a través del sitio web de la posada. Puedes acceder a través de un ferry privado o alquilar una bicicleta en el puerto, que está a unos 30 minutos de distancia. También puedes consultar sobre cómo pasar el tiempo en la isla y los planes de experiencia. Esperamos tu visita a este refugio escondido, donde la tranquilidad y la naturaleza te esperan.