atracción turística • 50 Noboriōjichō, Nara, 630-8213, Japón
Un día, de repente, apareció una extraña escena. El bambú creciendo sobre el Mokuroji sorprendió a quienes lo vieron. ¿Por qué se creó este paisaje tan sorprendente? Nos acercaremos al misterio de la asombrosa simbiosis entre el Mokuroji y el bambú.
El Mokuroji, un árbol gigantesco con más de 400 años, vio cómo su tronco se iba ahuecando, lo que permitió que el bambú brotara y creciera. Con el tiempo, el bambú creció grandemente y ahora se eleva más de 15 metros desde la cima del Mokuroji.
A simple vista, el bambú parece estar dañando al Mokuroji, pero en realidad han establecido una grandiosa relación simbiótica, ayudándose mutuamente. A medida que el tronco del Mokuroji envejece y se desmorona, el bambú absorbe los nutrientes. Por otro lado, el Mokuroji absorbe la humedad filtrada desde las raíces del bambú, ayudándose mutuamente en la supervivencia.
Esta asombrosa escena sigue fascinando a las personas. Los visitantes toman fotografías y comparten en las redes sociales. La comunidad local lo protege con cariño, convirtiéndolo en un ser que reconforta el corazón de las personas. La asombrosa simbiosis entre el Mokuroji y el bambú es verdaderamente un paisaje que encarna el misterio de la naturaleza.
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