hito histórico • 13 Ryōanji Goryōnoshitachō, Ukyo Ward, Kyoto, 616-8001, Japón
Si usted es un viajero que visita Kyoto, es probable que se dirija a destinos turísticos famosos como Kinkaku-ji o Kiyomizu-dera. Sin embargo, Kyoto también tiene muchos lugares menos conocidos que vale la pena visitar. Uno de ellos es el "Tsukubai" en el templo Ryōan-ji. Esta aparente insignificancia es en realidad una joya que encarna la esencia de la historia y la cultura de Kyoto.
Al entrar al templo Ryōan-ji, lo primero que notará son las esculturas de roca. Una de ellas es el "Tsukubai". Tsukubai (つくばい) se refiere a la postura encorvada para sentarse. Esta escultura de roca representa el sentimiento de satisfacción al mirar hacia abajo.
En el pedestal de la escultura está escrito "吾唯足知" (waga-wei-toku-shiru), que aproximadamente significa "Solo conoce la suficiencia". Esto representa la importancia de conocer la suficiencia en la filosofía del budismo zen. Si se puede estar satisfecho con la propia situación sin ser seducido por la riqueza material, ese podría ser el camino hacia la verdadera felicidad.
El "Tsukubai" no es solo una escultura. Contiene la sabiduría de vida del budismo zen, una fuente de conocimiento para mirar hacia adentro y encontrar la serenidad. Esta sabiduría de vida se transmite a través de esta obra de arte.
La sociedad contemporánea tiende a buscar la riqueza material, pero recordemos que la verdadera felicidad radica en el interior. Tener conciencia, compasión y encontrar una forma de vida que se adapte a uno mismo. Esa es la pregunta que esta escultura nos plantea.
Justo al lado del "Tsukubai" se encuentra la sala de té del templo Ryōan-ji. Allí, el tiempo parece transcurrir en silencio. Desde la ventana de la sala de té, se puede ver un pequeño jardín y escuchar el canto de los pájaros, creando un espacio sereno y tranquilo.
En la ceremonia del té, se valora mucho el espíritu del "Tsukubai". Eliminando la decoración innecesaria, en un espacio simple, uno puede enfrentarse a sí mismo. El tiempo para sentarse en meditación y tomar té es verdaderamente un momento de disfrutar del mundo del budismo zen.
Aunque pueda parecer una escultura sencilla del pueblo, el "Tsukubai" es en realidad un valioso patrimonio cultural que encarna la esencia de Kyoto. La combinación del budismo zen y la ceremonia del té da como resultado una obra cultural excepcional que conquista muchos corazones.
Cuando visites, asegúrate de pasar por el templo Ryōan-ji para experimentar algo diferente a los lugares turísticos famosos. Será una oportunidad para comprender el alma profunda de Kyoto, donde puedes experimentar la riqueza no desde lo material, sino desde el alma.
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