Este pequeño café tradicional está envuelto por el verde de las montañas de Yoshino. La acogedora decoración, hecha completamente a mano por el dueño, brinda una sensación de paz como si se estuviera en casa. Desde las mesas de la terraza abierta se puede disfrutar de la apacible vista del paisaje rural.
El almuerzo casero, elaborado con ingredientes frescos de temporada, es el auténtico sabor de la comida casera. Cada plato está lleno de cuidado y amor, para acompañar el arroz recién cocido. También se dice que se utiliza un huevo especial y lujoso en los platos de huevo.
La amable dueña y el dueño tratan a cada cliente con un esmero y atención sinceros. Los turistas que visitan pueden experimentar la alegría del viaje gracias a la cordial hospitalidad, que incluye proyectar imágenes de los cerezos en plena floración y ofrecer encuentros inesperados, e incluso alojamiento.
Este café tradicional es tan acogedor que te quedarás más tiempo del previsto. Cuando visites Yoshino, ¿por qué no haces una parada aquí? Descubrirás una auténtica y cálida atmósfera, así como platos caseros especiales que solo conocen los lugareños.
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