lugar de culto • 2301 Sannai, Nikko, Tochigi 321-1431, Japón
El Yomeimon, símbolo del Santuario Toshogu de Nikko, te dejará sin palabras con su lujosa decoración. Columnas y vigas adornadas con hojas de oro y tallas, y bajo los aleros, esculturas coloridas que sorprenden. No te pierdas las obras de Hidari Jingoro, conocido como el 'Miguel Ángel del Oriente'.
Dentro del santuario, encontrarás varias esculturas encantadoras que te harán sonreír. Los tres monos que 'no ven, no hablan, no oyen', y el gato durmiente que parece un felino real durmiendo, reflejan el sentido del humor de los artesanos.
Más allá de la pagoda de Okusha, después de subir más de 200 escalones de piedra, llegarás al mausoleo de Tokugawa Ieyasu. En este lugar solemne, puedes apreciar el respeto por el gran hombre que fundó el shogunato de Edo y sentir el peso de la historia.
El Santuario Toshogu de Nikko, registrado como Patrimonio de la Humanidad, muestra diferentes aspectos con cada estación. Cerezos en primavera, el verdor en verano, los colores otoñales y el paisaje nevado en invierno. No importa en qué temporada lo visites, te cautivará la belleza del complejo de santuarios que armoniza con la naturaleza.
El Santuario Toshogu de Nikko es un lugar único donde puedes experimentar la historia, la cultura y la maestría artesanal de Japón de una vez. Disfruta de la sensación de viajar en el tiempo mientras estás rodeado de decoraciones opulentas y una atmósfera solemne.