Creado a partir de la ciudad minera de Nagasaki, el Mini Cocina Ikura. Este pequeño café fue construido remodelando las antiguas casas de mineros. Su fachada de ladrillo y su cálida atmósfera interior de madera te harán recordar tiempos pasados.
En una esquina del café, se exhiben los artículos hechos a mano por el propio propietario. Cada uno de ellos está impregnado de cariño, una verdadera manifestación del corazón de la artesanía. Encontrar tu propio artículo encantador es uno de los mayores placeres de este café.
La actitud de servicio del propietario y del personal también refleja la calidez local. Un tono de voz calmado y atenciones detalladas te harán recordar los viejos barrios de antaño.
¿Por qué no experimentar el nostálgico ambiente y la hospitalidad encapsulados en este pequeño espacio? Con un tiempo tranquilo, seguramente podrás sumergirte en tus recuerdos del pasado.
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