lugar de culto • Kebaramiya, Kimino, Kaiso District, Wakayama 640-1473, Japón
El río Kishi que fluye por el pueblo de Kiminomachi en Wakayama alberga una enorme roca en su centro, como si hubiera descendido del cielo. Esta roca, conocida como 'Tate-Iwa Daimyojin', ha sido venerada por los lugareños durante años. Lavada por el flujo del río y resistente al viento y la lluvia a lo largo del tiempo, esta roca es verdaderamente una obra maestra creada por la naturaleza.
Un estrecho puente permite cruzar hacia Tate-Iwa Daimyojin. Aunque no aparece en los mapas, puede añadirse un toque de aventura a la visita. Desde el puente, se puede observar el flujo cristalino del río y la majestuosa roca en su centro. Combinado con la vegetación exuberante de los alrededores, el paisaje es como una pintura.
Ubicado a lo largo de la antigua carretera nacional, el tránsito de vehículos es escaso. Se puede disfrutar del ambiente tranquilo, lejos del bullicio, y relajarse escuchando el murmullo del río. Es altamente recomendable tomar aire fresco y revitalizar el cuerpo y la mente.
Cerca de esta área hay unos baños públicos con un ambiente japonés especial. Aunque no parezcan los típicos baños de atracciones turísticas, definitivamente valen una visita. Se puede descubrir un inesperado toque japonés.
Es necesario ser cauteloso al cruzar el puente, ya que es muy estrecho, dificultando incluso el cambio de dirección en motocicletas. Es mejor caminar despacio y con cuidado. De hecho, esto permite disfrutar más del paisaje.
El Tate-Iwa Daimyojin encapsula el encanto rural japonés. Belleza natural, el sonido del río, el ambiente rural tranquilo – todo lo que calma el alma está aquí. Cuando visites Kiminomachi, no te pierdas este tesoro oculto. Será una experiencia inolvidable.