lugar de culto • 540 Ōhararaikōinchō, Sakyo Ward, Kyoto, 601-1242, Japón
Enclavado en las montañas del noreste de Kioto, Sanjusangendo en Ohara. Este templo, con 1200 años de historia, es una antigua institución budista fundada por Saicho, el fundador de la secta Tendai. Con su alto estatus como un templo monzeki atendido por la realeza y sus impresionantes jardines, es realmente una de las principales atracciones de Kioto.
El principal atractivo de Sanjusangendo es, sin duda, la belleza de sus jardines. El jardín Shugakuen, centrado en un estanque, y el jardín Seiyu-en, con sus deslumbrantes caminos de piedras musgosas, lavan el alma del visitante. En primavera, los cerezos y rododendros florecen; en verano, las hortensias; en otoño, las hojas cambian de color; y en invierno, el paisaje nevado crea una vista diferente. Especialmente, el jardín cubierto de musgo produce una atmósfera serena y húmeda, que hace sentir como si uno se hubiera perdido en una pintura.
Otro de los puntos de atracción de Sanjusangendo son las estatuas de wara-be jizo dispersas por los jardines. Estas estatuas con expresiones adorables tienen un efecto curativo que provoca sonrisas instantáneas. Algunas estatuas tienen un pajarito como un buncho en la cabeza, lo que añade un toque encantador. Estas estatuas son un símbolo emblemático de Sanjusangendo que a menudo se ven en los carteles de campaña de JR.
Sanjusangendo no solo es un hermoso jardín, sino también una colección de edificios históricos y tesoros culturales relacionados con la familia imperial. En el Amida-do se encuentra la figura de Amida Nyorai, un tesoro nacional que se puede apreciar de cerca, siendo una obra de altísimo valor artístico. Otra atracción es la estatua de Buda de piedra que imita la del Gran Buda de Kamakura.
Para visitar Sanjusangendo, se puede caminar unos 10 minutos desde la parada de autobús más cercana (Ohara). A lo largo del camino de acceso, hay tiendas de souvenirs y lugares para tomar un refrigerio. El horario de visitas es de 9 a.m. a 4:30 p.m. Se cobra una tarifa de entrada, pero muchos visitantes sienten que vale la pena pagarla. Si llegan en coche, es recomendable utilizar el estacionamiento frente a Sanjusangendo (400 yenes).
Sanjusangendo es el lugar perfecto para encontrar calma y tranquilidad lejos del bullicio. Hermosos jardines, adorables estatuas de jizo y una profunda historia y cultura. La atmósfera única que estos elementos crean deja una impresión duradera. Cuando visiten Kioto, no se pierdan la oportunidad de venir aquí. Sin duda, encontrarán algo que resonará en su corazón.