En lo profundo de las montañas de la ciudad de Ōzu, prefectura de Ehime, se extienden terrazas de arroz tan hermosas como si estuvieran flotando en el cielo. Este lugar se conoce como las terrazas de arroz de Kashida, una obra de arte natural creada con el esmero de generaciones pasadas a lo largo de muchos años. El paisaje armonioso entre el entorno rural y las montañas deja a los visitantes asombrados.
Las terrazas de arroz de Kashida se encuentran a una altitud de 500 metros, con un total de 73 niveles que dibujan una curva encantadora. Cada terraza está construida sólidamente, con paredes de piedra en los bordes, como resultado del esfuerzo de generaciones pasadas. Durante la temporada de siembra, los escalones verdes resplandecen, y en otoño, el paisaje dorado atrae a los visitantes.
La creación de terrazas de arroz en esta región se remonta al período Edo. En ese entonces, la seguridad alimentaria era la prioridad absoluta, y la gente dedicó tiempo y esfuerzo para cultivar arroz en las laderas de las montañas, como una continuación de la vida. Las terrazas de arroz de Kashida son un símbolo de esa tradición, y el paisaje montañoso rural todavía conserva un fuerte sentido romántico. Puede ver la actividad natural tranquila en esta área a través de pequeños canales que fluyen junto a las terrazas o los bosques de arbustos que rodean las terrazas.
Las terrazas de arroz de Kashida están siendo conservadas y administradas adecuadamente gracias al esfuerzo de la gente local. Por otro lado, se han construido miradores, áreas de descanso y otras comodidades para los turistas. Los visitantes pueden disfrutar de nuevas experiencias y del hermoso paisaje rural a través del tiempo y algunas nuevas comodidades.
Las terrazas de arroz de Kashida son un microcosmos de la historia y la cultura grabadas en la tierra de la prefectura de Ehime. Es un destino turístico valioso que le permite contemplar paisajes hermosos y experimentar la sabiduría y actividad natural de la gente local.
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