lugar de culto • 32 Takagamine Senzokuchō, Kita Ward, Kyoto, 603-8469, Japón
El encantador templo de Ginzan con el apacible sonido del agua clara del río Kamiya. Al pasar por la pintoresca puerta de la montaña, los escalones de piedra cubiertos de musgo invitan al visitante a un espacio de silencio. Este templo ubicado en el valle, envuelto en el verde de Takamine, conocido como el rincón de Kioto, proporciona un lujoso tiempo lejos del bullicio de la ciudad.
El pequeño jardín que lleva al salón principal emite la elegancia del exquisito jardín de musgo. La alfombra verde extendida y las piedras y estanques colocados sobre ella crean un paisaje como de una pintura. El musgo, que muestra diversas expresiones en las diferentes estaciones, también es encantador cuando está cubierto de rocío matutino.
La llegada del otoño se anuncia con el espectacular escenario de las vibrantes hojas de otoño. Los numerosos árboles de hojas de otoño plantados alrededor del salón principal del templo de Ginzan son obras maestras naturales que adornan los cambios de estación. Además, en este templo con una rica historia abierta en la era de Edo, se dice que también hay enormes árboles que superan los 300 años, lo que hace que uno piense en su larga historia.
El atractivo del templo de Ginzan no se limita a los lugares de interés. Es probable que te encuentres con la calidez de la gente que vive en el pueblo cercano que ha soportado las dificultades históricas debido a cambios en la secta, así como con la personalidad del sacerdote. El encuentro con estas personas, que han apoyado la historia de las penurias sufridas por el cambio de secta desde la era de Edo, seguramente será una experiencia memorable en tu viaje.
El templo de Ginzan es diferente de los lugares turísticos habituales, pero emana un atractivo aire de tranquilidad y gracia. Cuando visites Kioto, es un templo poco conocido que vale la pena visitar una vez.
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